El próximo lunes 15 a las 12 de la noche se termina el plazo establecido por el Instituto Morelense de Procesos Electorales y Participación Ciudadana (Impepac) para el registro de candidatos a diputaciones y ayuntamientos. Si normalmente este periodo es difícil, en esta ocasión será una auténtica locura, pues habrá que agregarla las dificultades que provoca la pandemia y las nuevas disposiciones del órgano local electoral.
Como ya se informó oportunamente, en sesión extraordinaria el Consejo Estatal Electoral del Impepac aprobó los Lineamientos para el Registro y Asignación de Personas de la Comunidad LGBTIQ+, Personas con Discapacidad, Afrodescendientes, Jóvenes Y Adultos Mayores, para participar en el Proceso Electoral 2020-2021 en el que se elegirán diputaciones locales al Congreso del Estado e integrantes de los ayuntamientos, lo anterior en cumplimiento a la sentencia TEEM/JDC/26/2021-3, y su acumulado TEEM/JDC/27/2021-3, dictada por el Tribunal Electoral del Estado de Morelos.
Estos lineamientos son de observancia general y obligatoria para el Impepac, los Consejos Distritales y Municipales Electorales, para los partidos políticos y para quienes aspiren a ser candidatas y candidatos a cargos de elección popular por el principio de representación proporcional en el caso de las diputaciones y de los municipios del estado de Morelos para el caso de candidaturas a presidencia municipal o sindicatura y en su caso a una regiduría de la planilla respectiva, para el Proceso Electoral ordinario 2020-2021.
¿Qué significa esto?
Significa que en las elecciones municipales los partidos políticos, coaliciones y, en su caso, candidaturas independientes, deberán postular candidaturas observando el principio de paridad de género y las acciones afirmativas en materia de candidaturas indígenas, para personas de la comunidad LGBTIQ+, personas con discapacidad, afrodescendientes, jóvenes y adultos mayores, para cada uno de los municipios del estado con excepción de Coatetelco, Xoxocotla y Hueyapan, que se regirán por usos y costumbres.
Deberán postular a una persona de alguno de los grupos vulnerables señalados como propietaria y otra como suplente al cargo de presidencia municipal o sindicatura o en su caso a la fórmula de candidaturas a una regiduría de la planilla respectiva.
Es decir que, dentro de las postulaciones de personas indígenas, personas LGBTIQ+, personas con discapacidad, afrodescendientes, respetando la paridad, se procure la postulación de personas jóvenes y adultos mayores.
“Para el caso de las diputaciones por el principio de representación proporcional, los partidos políticos, coaliciones y en su caso, candidaturas comunes, deberán postular candidaturas observando el principio de paridad de género y las acciones afirmativas en materia de candidaturas indígenas, deberán incluir en sus candidaturas una fórmula integrada por una persona propietaria y una suplente de cualquiera de los grupos vulnerables en las listas de diputaciones por este principio”, informó el Impepac a través de un comunicado en el que advierten que las candidaturas de las personas LGBTIQ+ y afrodescendientes deberán acompañar carta bajo protesta de decir verdad, en la que se precise que la persona acredita su adscripción como afromexicana, o de la diversidad sexual.
Y pone el siguiente ejemplo:
“Si a un partido se le deduce una regiduría asignada a una persona que no pertenece a alguno de los grupos vulnerables, tendrá que ser sustituida por una persona perteneciente a grupos vulnerables, cuidando de que no se trate de candidaturas ya asignadas a personas indígenas, pero en todos los casos dicha sustitución deberá provenir de la lista de donde haya sido deducido, respetando además la prelación y la paridad de género”.
Corresponderá a personas de la comunidad LGBTIQ+, personas con discapacidad, afrodescendientes, jóvenes y adultos mayores la asignación de una diputación por el principio de representación proporcional.
Si de por sí los partidos políticos estaban muy preocupados porque “no hay mujeres que quieran participar en política”, ahora la tienen más difícil, pues deberán incluir forzosamente a personas que pertenezcan a esos grupos.
Y en la capital del estado y su zona conurbada hay mucho de dónde escoger, pero la situación se complica en aquellos municipios alejados o con una población muy reducida.
Ayer visité la oficina de un partido político que no es de los nuevos pero tampoco es muy conocido. Me tocó ser testigo de cómo están “como locos” haciendo los reacomodos necesarios para cumplir con los lineamientos pero también para “cachar” a los líderes que no fueron tomados en cuenta por los partidos “grandes”.
Aquello parecía la casa de bolsa de Wall Street en los momentos más álgidos. Un miembro del partido haciendo llamadas telefónicas, otros tomándole fotos a los que ya aceptaron ser sus candidatos, otro más reuniendo los documentos, etc.
En eso llegó la presidenta del partido muy contenta. Acababa de convencer a una diputada de Morena a que sea su candidata a presidenta municipal, molesta porque no fue tomada en cuenta en la lista que recientemente dio a conocer el partido de López Obrador.
Eso es una gran noticia para ese partido, pero seguramente habrá que decirle a la persona que ya estaba contemplada para ese cargo que siempre no, y ver si quiere negociar algo, o se va a otro partido todavía más chico. Y así sucesivamente.
Estos últimos días serán de mucho estrés para los dirigentes de partidos políticos y aspirantes a cargos de elección popular. Pueden ocurrir cosas tan increíbles como lo que le sucedió a Moisés Agosto hace tres años, cuando tenía la promesa de que sería el candidato de Morena a la presidencia municipal de Cuautla. “Se vino con toda su planilla en un autobús a una casa en Cuernavaca porque le dijeron que ahí esperara, que ellos (los de Morena) le indicarían en qué momento arribar a las oficinas del Impepac para hacer su registro. Pasaron las horas y después se enteró de que Morena ya había registrado a Jesús Corona como su candidato”, relató una persona que hoy será su coordinador de campaña para el mismo cargo, pero esta vez por el Partido Encuentro Social.
En esta ocasión no habrá registros “in situ”, será cibernético. Pero si en forma presencial se hacían “chanchullos”, imagínense lo que podrá hacerse mediante el uso del internet.
HASTA MAÑANA.