El linchamiento mediático de que está siendo objeto la dirigente del Partido del Trabajo, Tania Valentina Rodríguez Ruiz, tiene su origen en aquel sábado 13 de enero del presente año a las cinco de la tarde, cuando la entonces candidata a la presidencia de la República por Morena, Claudia Sheinbaum Pardo, encabezaba un mitin en el parque de Beisbol de la colonia Carolina, y a 10 kilómetros de ahí, en la Alameda Solidaridad, la petista se atrevía a hacer su propia movilización de gente, no obstante que se supone que ambos partidos son integrantes de la Coalición Juntos Seguiremos Haciendo Historia.
En esa asamblea multitudinaria, a mano alzada como los enseñó Andrés Manuel López Obrador, los petistas acordaron ir solos en las candidaturas a diputaciones locales y presidencias municipales, pero respetar el acuerdo nacional de aliarse con Morena por cuanto a la presidencia de la República.
El otro hecho que marcó el distanciamiento entre Margarita González Saravia y Tania Valentina Rodríguez fue el que ocurrió en plena campaña en el poblado de Tlatenchi, donde la primera se reunió con simpatizantes de Morena y su candidato a la presidencia municipal de Jojutla, Alan Martínez García, en el que también se encontraban los candidatos a diputados federal y local, Juan Ángel Flores Bustamante y Alfonso de Jesús Sotelo, respectivamente.
De pronto, simpatizantes del Partido del Trabajo (PT) arribaron al lugar y quisieron ingresar. La gente de Morena cerró las puertas, pues aseguró que era un evento de ese partido. La tensión aumentó y no tardó nada para que los petistas dieran portazo. Intentaron ingresar y se enfrentaron con los morenistas. El evento se detuvo y Margarita González Saravia, en medio de empujones, golpes e insultos, dejó el lugar con otros militantes y candidatos.
Los militantes del PT que llegaron a reventar el evento estuvieron encabezados por el candidato a presidente municipal de Jojutla de esa fuerza política, Bertiel Miranda Rosas, quien militaba en Morena y de hecho fue parte del actual ayuntamiento como director de Agricultura del municipio. Buscó la candidatura por Morena, pero le fue negada y se fue al PT.
Tania Valentina soñaba con ser gobernadora. Si a la hora de repartirse las candidaturas entre los dirigentes de los partidos que integran la coalición, al Partido del Trabajo le asignaban una gubernatura (como hace seis años se la asignaron al PES), entonces tenía amarrada esa posición. Pero a Gerardo Fernández Noroña no le interesó apoyarla pues él sólo pugnaba por su Senaduría; cuando quedó en la lista de aspirantes que serían encuestadas, estaba segura que saldría más popular que Margarita y Sandra Anaya. Por eso cuando Mario Delgado dio a conocer los resultados, la petista salió echando lumbre junto con Rabindranath Salazar.
A final de cuentas se dio cuenta de su realidad: ni gobernadora, ni senadora, ni siquiera diputada federal. Sólo le quedaba el reducto que tiene desde hace más de una década: la diputación local plurinominal. Por eso cuando la comenzaron a criticar por haberse registrado como aspirante afrodescendiente no hizo caso y prácticamente dejó en claro que ella podía hacer con su partido lo que quisiera.
Por otro lado, la férrea defensa de Tania Valentina hacia el fiscal Uriel Carmona también erosionó la relación con Morena. De manera personal, como diputada, como dirigente partidista, y de todas las formas posibles, Rodríguez Ruiz protegió al fiscal que ya juzgaron y declararon culpable desde la presidencia de la República.
Seguramente esa protección no es gratuita. Con esos antecedentes la Fiscalía General del Estado jamás habría tocado a la sempiterna legisladora ni con el pétalo de una rosa. Ahí es donde aparece la oportunista Fiscalía Especializada de Combate a la Corrupción y su alfil el protagónico Edgar Núñez Urquiza, desempolvando una carpeta de investigación que se inició con la denuncia del director jurídico de la otrora Comisión Estatal de Seguridad.
El asunto es simple: el año pasado detienen una camioneta con armas largas y droga, y al revisar las placas resulta que el vehículo está a nombre de Tania Valentina Rodríguez Ruiz. Pudiendo haberle iniciado desde aquel momento el procedimiento que establece el artículo 136 de la Constitución Política del Estado Libre y Soberano de Morelos, se esperaron hasta que hubiera el momento político oportuno.
Dicho artículo dice textualmente: “Para proceder penalmente en contra de los diputados al Congreso del Estado, el Gobernador y los Magistrados del Tribunal Superior de Justicia, por la comisión de delitos federales durante el tiempo de su encargo, el Congreso del Estado declarará por mayoría absoluta del total de sus miembros, previa audiencia del acusado por sí, por su defensor, o por ambos, si ha lugar o no a la formación de causa.
“En caso negativo cesará todo procedimiento en contra del servidor público, sin perjuicio de que la acusación continúe cuando éste termine su cargo. En caso afirmativo, quedará suspendida en el ejercicio de sus funciones y a disposición de los Tribunales comunes, para la instrucción del proceso respectivo”.
Aquí es donde el asunto que debería ser totalmente jurídico se torna político: la solicitud tiene que pasar por la Junta Política y de Gobierno, conformada por los coordinadores parlamentarios de todos los partidos representados, incluyendo por supuesto al PT que tiene dos votos. Si pasa a votación al Pleno, se requieren 14 votos, y ¿quién creen que es la número 14 al momento de votar? Pues Tania Valentina.
Como podemos ver, el asunto está entrampado y parece que tendrán que recurrir a su dirigencia nacional para que la controle o lleguen a un acuerdo satisfactorio para todos.
EL FIASCO DE CHALO FLORES. – La gobernadora Margarita González Saravia acudió ayer al municipio de Xochitepec a invitación del presidente municipal, el príista (aunque no por mucho tiempo), Gonzalo Flores Zúñiga, para inaugurar un mural conmemorativo al 71 aniversario del sufragio de la mujer. El evento resultó muy conmovedor pues hasta estuvo como invitada la hija de Claudia Ochoa, quien fuera alcaldesa de Xochitepec en el periodo 1967-1969; y parecía que todo iba a salir a pedir de boca, pero quien sabe a quién se le ocurrió que la mandataria hiciera un recorrido por el mercado municipal de ese “Pueblo Mágico”, lo que resultó todo un fiasco.
Para empezar el mercado está abandonado, casi todos los locales están cerrados y en los pocos que estaban abiertos los locatarios se quejaron de la falta de apoyo del gobierno municipal. “Este Mercado debería llamarse Luis Donaldo Colosio, porque está igual de muerto”, dijo una señora. Otra más comentó que todavía en la mañana estaban limpiando y pintando para que quedara bonito cuando llegara la gobernadora, “ojalá siempre viniera para que todo estuviera limpio como hoy”. Total que muy bonito el mural, pero el evento se vio empañado por las quejas de la gente del mercado municipal.
HASTA EL LUNES.