¡Bravo, ganó la opacidad!

El pasado 20 de marzo se publicó en el Diario Oficial de la Federación un decreto mediante el cual se expidieron diversas leyes secundarias en materia de acceso a la información pública y protección de datos personales, en cumplimiento del mandato constitucional derivado de la reforma del 20 de diciembre de 2024. Esta reforma modificó el artículo 6o. constitucional y ordenó la extinción del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI), cuyas atribuciones fueron redistribuidas entre diversas entidades.

Los artículos transitorios de la reforma constitucional establecieron la obligación de emitir legislación secundaria para armonizar el marco jurídico con el nuevo modelo institucional.

Específicamente, el artículo 3 fracción IV, señala: “Autoridad garante local: Órganos encargados de la contraloría u homólogos en el poder ejecutivo de las entidades federativas, quienes conocerán también de los asuntos en materia de transparencia de sus municipios o demarcaciones territoriales de Ciudad de México, conforme a lo que establezcan sus respectivas leyes”.

Quien esto escribe ha sido testigo del largo camino recorrido por la sociedad civil y legisladores para hacer realidad el llamado Derecho a Saber, desde la Ley Federal de Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental (LFTAIPG) en junio del 2002, hasta nuestros días.

Nuestra entidad siempre estuvo a la vanguardia en materia de transparencia. En 2003 se promulga Ley de Información Pública, Estadística y Protección de Datos Personales del Estado de Morelos publicada en el Periódico Oficial “Tierra y Libertad” el 27 de agosto de 2003.

Previamente, fue necesario modificar los artículos 2º., y 23-A de la Constitución Política del Estado Libre y Soberano de Morelos para dotar de contenido al derecho fundamental de acceso a la información y la protección de datos personales en el Estado, a la par que se optimiza la gestión pública en general, sujetando a los servidores a un permanente escrutinio público de la sociedad y generando información confiable, objetiva y neutral a partir de la investigación de la sociedad morelense.

Vimos el nacimiento del Instituto Morelense de Información Pública y Estadística (IMIPE) y podemos jactarnos de haber sido de los primeros usuarios de su infraestructura, utilizando las solicitudes de información pública para sustentar reportajes de investigación.

Hoy, vemos con tristeza como todo se desmorona. El pasado 20 de marzo a las 23:50 horas se dio por concluida la última sesión del INAI. Lamentablemente, el órgano garante del derecho a la información se va en medio de escándalos por el uso discrecional de los recursos. Sin embargo, recordemos que son las personas, no las instituciones las que se portan mal.

Y esta especie de “celebración por la opacidad” se refleja en los sujetos obligados del estado de Morelos, que ya saben que los días del IMIPE están contados, y que después corresponderá a las propias dependencias gubernamentales calificar si debe entregarse o no la información solicitada.

En una especie de burla, los sujetos obligados recurren a argucias legaloides para no contestar inmediatamente, a sabiendas de que, en lo que llega la queja al IMIPE y emite una resolución, ya habrá la nueva legislación que hará más que imposible transparentar el ejercicio gubernamental.

Van dos ejemplos: pedimos a diversas instituciones “copia simple de las facturas pagadas a medios de comunicación durante el periodo de enero a diciembre del 2024, así como los contratos por prestación de servicios que hubiere por asesoría o similares”.

De inmediato, antes de que venza el término para contestar, el Colegio de Morelos (antes Centro de Investigación y Docencia en Humanidades) que interpone una “prevención” argumentando que no entendía que quiero decir con “similares”.  De inmediato contesté con una transcripción de la Real Academia Española: Del lat. mediev. similaris, y este der. del lat. similis ‘semejante’.

adj. Que tiene semejanza o analogía con algo. Sin. semejante, parecido, parejo, rayano, próximo, igual, afín, análogo, comparable, símil.

Este truco consiste en que, si no contestas la prevención dentro del término, ya no puedes interponer el recurso ante el IMIPE y el sujeto obligado queda como si hubiera cumplido.

El otro ejemplo de cómo evadir la transparencia lo dio el Ayuntamiento de Emiliano Zapata que preside Santos Tavarez, cuyo tesorero dio una contestación digna de ser enmarcada:

“Al respecto me permito proporcionar el importe erogado durante el ejercicio fiscal 2024 por concepto de gastos de comunicación social de $4,609, 362.94 monto reflejado en la cuenta pública del ejercicio 2024, derivado que la información contenida en las facturas es información sensible y confidencial, tipificada en los artículos 3, fracciones IX y X de la Ley de Protección de Datos Personales en Posesión de Sujetos Obligados del Estado de Morelos, y Artículos 113 fracciones I, II y III, 116 de la Ley de Transparencia y Acceso a la Información”.

Firma: C.P. José Reynold Quiñones Salinas, tesorero municipal de Emiliano Zapata (y antes de Cuernavaca, con Antonio Villalobos).

De coincidir con este mismo criterio los 36 Ayuntamientos, Gobierno del Estado y el IMIPE, absolutamente todas las facturas serán consideradas información confidencial, y habrá triunfado la opacidad en este país.

VALIENTE POSICIÓN DE MEGGIE SALGADO. – En un acto de censura y violencia política dentro del Congreso de la Unión, la diputada federal Meggie Salgado fue silenciada por órdenes del presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Carlos Gutiérrez, mientras intentaba emitir su postura sobre el caso Cuauhtémoc Blanco.

Esto ocurrió durante la sesión ordinaria en la que se discutió y votó el dictamen de la Sección Instructora, que resolvió la improcedencia de la solicitud de desafuero en contra del exgobernador de Morelos, Cuauhtémoc Blanco Bravo.

Durante su intervención, la legisladora buscaba representar la voz de las mujeres que han sido calladas en Morelos. Sin embargo, al tomar el micrófono, Gutiérrez ordenó cortar su sonido, impidiéndole continuar con su participación. Irónicamente, esto ocurrió cuando Salgado Ponce manifestaba ser “la voz de aquellas que no la tienen”.

A ver si no hay represalias políticas en contra de Meggie y de las diputadas federales que decidieron no apoyar al presunto violador en grado de tentativa.

HASTA MAÑANA.